(…)
- No me he dado la vuelta, ¿no?
Babi se apresura a librarse de los vaqueros y salta detrás de él sobre la moto en bragas y sostén.
-¡Canalla asqueroso, bastardo!, ¡Cerdo! – lo aporrea. Sobre los hombros, el cuello, la espalda, la cabeza. Step se dobla hacia delante tratando de protegerse lo mejor posible.
-¡Ay, basta! Ay. ¿Qué he hecho de malo? He echado una miradita, pero no me he dado la vuelta, ¿no? He mantenido mi palabra… Ay mira que no te doy la cazadora.
- ¿Qué? ¿Qué no me la das? Entonces cojo mis vaqueros y te los paso por la cara, ¿quieres verlo?
Babi empieza a quitarle la cazadora subiéndosela por las mangas.
- Está bien. Está bien. ¡Basta! Cálmate. Venga, no hagas eso. Ahora te la doy.
Step deja que se la quite. Acto seguida, enciende la moto. Babi le da un último puñetazo.
- ¡Cerdo!- luego se mete deprisa la cazadora intentando taparse lo más posible con ella. El resultado es escaso. Las dos piernas se quedan fuera, incluido el borde de las bragas.
- Eh…¿sabes que no estás mal? Deberías lavarte más a menudo…pero tienes un culo realmente bonito…en serio.
Ella intenta darle un golpe en la cabeza. Step se inclina inmediatamente riéndose. Mete la primera y arranca. Luego hace como si olfateara el aire.
- Eh, ¿notas tú también un olor extraño?
- ¡Imbécil! ¡Conduce!
- Parece estiércol…
En ese momento, de detrás de un arbusto que hay delante de ellos, sale un perro lobo. Corre hacia ellos ladrando. Step lo apunta con la moto. El faro lo deslumbra por un instante. Sus ojos rojos brillan rabiosos en la noche. Muestra los dientes al gruñir, blancos y afilados.
Basta en este instante. Step reduce.
(…)
Babi chilla. Levanta las piernas desnudas y se agarra con fuerza a los hombros de Step.
(…)
Babi tiene todavía las piernas apretadas alrededor de la cintura de Step. Poco a poco, la moto reduce la marcha. Step le acaricia la pierna.
- Por poco, ¿eh?, y esos bonitos muslos acaban mal. Entonces era cierta la historia del perro…
Babi le quita la mano de la pierna y la hace caer a un lado.
- No me toques. – se impulsa hacia atrás en el sillín, volviendo a poner los pies en los pedales y se cierra la cazadora. Step le pone de nuevo la mano sobre la pierna - ¡Te he dicho que no me toques con esa mano!- Babi se la quita. Step sonríe y cambia de mano. Babi le aparta también la derecha.
- ¿Ni siquiera puedo con esta? Step se ríe, sacude la cabeza y acelera.
(…)
Al final llegan sanos y salvos a casa. (… )
- Bueno, gracias por todo. Oye, te tiro la cazadora por la ventana.
Step le mira las piernas. Babi se agacha. La chaqueta baja un poco más, pero el resultado sigue siendo muy pobre. Step sonríe.
- Puede que nos veamos otra vez. Veo que tienes argumentos muy interesantes..
- ¿Te he dicho ya que eres un cerdo?
- Sí, creo que sí… entonces paso a recogerte mañana por la noche.
- No podría. Creo que no podría resistir otra noche como esta
- ¿Por qué, no te has divertido?
- ¡Muchísimo! (…)
- Con mi cazadora encima.
- Ah, claro, lo olvidaba.
- Y, sobre todo, no me has dicho una cosa.
- ¿Qué?
- Que has hecho todo esto conmigo.
Babi lo mira. Qué tipo. Tiene una sonrisa preciosa. Que lástima que tenga tantos defectos. En lo tocante al carácter. Sobre el físico no tiene nada que objetar. Al contrario. Decide sonreírle. Al fin de cuentas, no le supone un gran esfuerzo.
- Sí, tienes razón. Bueno hasta luego.
Babi hace ademán de alejarse. Step le coge la mano. Esta vez con dulzura. Babi se resiste un poco, luego se deja hacer. Step la atrae hacia él, acercándola a la moto. La mira. Tiene el pelo largo, despeinado, tirado hacia atrás por el viento frío de la noche. Su piel es blanca, está helada. Sus ojos son intensos, buenos. Es guapa. Step desliza una mano bajo la cazadora. Babi abre los ojos como platos, ligeramente asustada, emocionada. Siente subir su mano, extrañamente cálida. Por su espalda hacia arriba. Se detiene justo al cierre del sostén. Babi se apresura a llevarse la mano detrás. La pone encima de la suya, lo obliga a pararse. Step sonríe.
(…)
Babi asiente una vez más, después cierra los ojos. Step sigue besándola. Sube, roza sus frescas mejillas, , sus orejas congeladas. Un soplo caliente y provocativo la hace estremecerse más abajo. Step se acerca al borde rosado de sus labios. Babi suspira temblando. Luego abre la boca, lista para acoger su beso. En ese momento, Step se para. Babi permanece así por un momento, con l boca entreabierta, los ojos cerrados. Los abre de repente. Step está delante de ella con los brazos cruzados. Sonríe. Sacude la cabeza.
- Ay, Babi, Babi. Así no se puede. Soy un cerdo, un animal, una bestia, un violento. Dices, dices, pero al final consientes… y hasta te dejarías besar. ¿Ves cómo eres? ¡Eres una incoherente!
Babi enrojece de rabia.
- ¡Y tú un cabrón!
Empieza a darle puñetazos. Step trata de protegerse mientras se ríe.
(…)
- No me he dado la vuelta, ¿no?
Babi se apresura a librarse de los vaqueros y salta detrás de él sobre la moto en bragas y sostén.
-¡Canalla asqueroso, bastardo!, ¡Cerdo! – lo aporrea. Sobre los hombros, el cuello, la espalda, la cabeza. Step se dobla hacia delante tratando de protegerse lo mejor posible.
-¡Ay, basta! Ay. ¿Qué he hecho de malo? He echado una miradita, pero no me he dado la vuelta, ¿no? He mantenido mi palabra… Ay mira que no te doy la cazadora.
- ¿Qué? ¿Qué no me la das? Entonces cojo mis vaqueros y te los paso por la cara, ¿quieres verlo?
Babi empieza a quitarle la cazadora subiéndosela por las mangas.
- Está bien. Está bien. ¡Basta! Cálmate. Venga, no hagas eso. Ahora te la doy.
Step deja que se la quite. Acto seguida, enciende la moto. Babi le da un último puñetazo.
- ¡Cerdo!- luego se mete deprisa la cazadora intentando taparse lo más posible con ella. El resultado es escaso. Las dos piernas se quedan fuera, incluido el borde de las bragas.
- Eh…¿sabes que no estás mal? Deberías lavarte más a menudo…pero tienes un culo realmente bonito…en serio.
Ella intenta darle un golpe en la cabeza. Step se inclina inmediatamente riéndose. Mete la primera y arranca. Luego hace como si olfateara el aire.
- Eh, ¿notas tú también un olor extraño?
- ¡Imbécil! ¡Conduce!
- Parece estiércol…
En ese momento, de detrás de un arbusto que hay delante de ellos, sale un perro lobo. Corre hacia ellos ladrando. Step lo apunta con la moto. El faro lo deslumbra por un instante. Sus ojos rojos brillan rabiosos en la noche. Muestra los dientes al gruñir, blancos y afilados.
Basta en este instante. Step reduce.
(…)
Babi chilla. Levanta las piernas desnudas y se agarra con fuerza a los hombros de Step.
(…)
Babi tiene todavía las piernas apretadas alrededor de la cintura de Step. Poco a poco, la moto reduce la marcha. Step le acaricia la pierna.
- Por poco, ¿eh?, y esos bonitos muslos acaban mal. Entonces era cierta la historia del perro…
Babi le quita la mano de la pierna y la hace caer a un lado.
- No me toques. – se impulsa hacia atrás en el sillín, volviendo a poner los pies en los pedales y se cierra la cazadora. Step le pone de nuevo la mano sobre la pierna - ¡Te he dicho que no me toques con esa mano!- Babi se la quita. Step sonríe y cambia de mano. Babi le aparta también la derecha.
- ¿Ni siquiera puedo con esta? Step se ríe, sacude la cabeza y acelera.
(…)
Al final llegan sanos y salvos a casa. (… )
- Bueno, gracias por todo. Oye, te tiro la cazadora por la ventana.
Step le mira las piernas. Babi se agacha. La chaqueta baja un poco más, pero el resultado sigue siendo muy pobre. Step sonríe.
- Puede que nos veamos otra vez. Veo que tienes argumentos muy interesantes..
- ¿Te he dicho ya que eres un cerdo?
- Sí, creo que sí… entonces paso a recogerte mañana por la noche.
- No podría. Creo que no podría resistir otra noche como esta
- ¿Por qué, no te has divertido?
- ¡Muchísimo! (…)
- Con mi cazadora encima.
- Ah, claro, lo olvidaba.
- Y, sobre todo, no me has dicho una cosa.
- ¿Qué?
- Que has hecho todo esto conmigo.
Babi lo mira. Qué tipo. Tiene una sonrisa preciosa. Que lástima que tenga tantos defectos. En lo tocante al carácter. Sobre el físico no tiene nada que objetar. Al contrario. Decide sonreírle. Al fin de cuentas, no le supone un gran esfuerzo.
- Sí, tienes razón. Bueno hasta luego.
Babi hace ademán de alejarse. Step le coge la mano. Esta vez con dulzura. Babi se resiste un poco, luego se deja hacer. Step la atrae hacia él, acercándola a la moto. La mira. Tiene el pelo largo, despeinado, tirado hacia atrás por el viento frío de la noche. Su piel es blanca, está helada. Sus ojos son intensos, buenos. Es guapa. Step desliza una mano bajo la cazadora. Babi abre los ojos como platos, ligeramente asustada, emocionada. Siente subir su mano, extrañamente cálida. Por su espalda hacia arriba. Se detiene justo al cierre del sostén. Babi se apresura a llevarse la mano detrás. La pone encima de la suya, lo obliga a pararse. Step sonríe.
(…)
Babi asiente una vez más, después cierra los ojos. Step sigue besándola. Sube, roza sus frescas mejillas, , sus orejas congeladas. Un soplo caliente y provocativo la hace estremecerse más abajo. Step se acerca al borde rosado de sus labios. Babi suspira temblando. Luego abre la boca, lista para acoger su beso. En ese momento, Step se para. Babi permanece así por un momento, con l boca entreabierta, los ojos cerrados. Los abre de repente. Step está delante de ella con los brazos cruzados. Sonríe. Sacude la cabeza.
- Ay, Babi, Babi. Así no se puede. Soy un cerdo, un animal, una bestia, un violento. Dices, dices, pero al final consientes… y hasta te dejarías besar. ¿Ves cómo eres? ¡Eres una incoherente!
Babi enrojece de rabia.
- ¡Y tú un cabrón!
Empieza a darle puñetazos. Step trata de protegerse mientras se ríe.
(…)